Argumento:
En la segunda parte de nuestro programa nos situamos en el momento de “Edipo en la actualidad”. Lacan, a partir del análisis que realiza de la tragedia de los Coûfontaine de Paul Claudel, señala, que cuando el hijo de esta familia se casa con la mujer de su padre, no se casa con su madre como en el Edipo de Sófocles[1]. Nos acerca de esta manera a la descomposición estructural de la figura de la madre. Mujer y madre se separan a diferencia de la madre freudiana del Edipo en la que se resumen todos los valores del deseo y del goce.
La última parte del Seminario se inspira en el propio escrito de Lacan “Observación sobre el informe de Daniel Lagache”. Lacan situará a i(a) e I(A). De hecho el esquema óptico ya apareció en 1954, en el capítulo VII del Seminario I, “La tópica de lo imaginario” y en el capítulo X donde añadió el espejo plano al cóncavo. De lo que se trata con dicho esquema es de ilustrar la imbricación entre el mundo real y el imaginario en la economía psíquica.
Una constelación de insignias, marcas indestructibles de las respuestas que convirtieron al grito en una llamada son las que constituyeron el Ideal del yo. Marcas inscriptas con el rasgo del significante.
Lacan aborda en el último tramo de este Seminario la problemática de la Transferencia al final del análisis y plantea ahí cuál es el duelo a realizar, dando una indicación técnica muy precisa a los analistas sobre el uso de su ser y de su posición en la transferencia, que interroga bajo dos formas: I y a.
[1] Lacan, J. Seminario La transferencia Libro 8 p. 363. Editorial Paidós